Las puertas cortafuegos son una parte fundamental de la protección pasiva contra los incendios de nuestras estructuras. Estas impiden la propagación del fuego en el interior de un edificio comercial o una vivienda, permitiendo evacuar de forma segura a sus ocupantes.

Las cerraduras para puertas cortafuegos se utilizan para complementar la funcionalidad de estas puertas. Como es natural, las cerraduras de las puertas cortafuegos son muy diferentes de sus homólogas tradicionales.

Por supuesto, su principal característica distintiva es su resistencia a la exposición prolongada al calor y al fuego, pero no es la única. A continuación descubrirás cómo son las cerraduras para puertas cortafuegos y qué buscar al elegir una.

No son solo cerraduras resistentes al calor

Las cerraduras para puertas cortafuegos no deben confundirse con las cerraduras clasificadas para incendios, o resistentes al calor.

Hay muchas cerraduras comerciales que tienen una clasificación de incendio. Sin embargo, su diseño se centra en evitar que los delincuentes y los ladrones dañen la cerradura quemando sus componentes.

En muchos casos las cerraduras resistentes se bloquearán completamente si son sometidas a un incendio moderado por algunos minutos. En la mayoría de sus aspectos, incluyendo sus copias de llaves Barcelona, son idénticas a una cerradura normal.

La naturaleza de las cerraduras para puertas cortafuegos es bastante diferente y tienen una serie de requisitos distintos que dictan cómo deben utilizarse.

Cómo son las cerraduras para puertas cortafuegos

Características de las cerraduras para puertas cortafuegos

Para entender lo que se requiere de estas cerraduras, es necesario comprender la finalidad de las puertas cortafuegos. Esencialmente, se trata de una puerta que debe funcionar con normalidad la mayor parte del tiempo

Esto significa que debe tener cierta capacidad para proporcionar y restringir el acceso. Además de esto una puerta cortafuegos debe permitir una salida rápida en caso de incendio u otra emergencia.

Una puerta cortafuegos también debe ser capaz de contener un incendio dentro de una zona determinada y evitar que se propague a otras partes del edificio.

Las cerraduras de estas puertas incluyen otros componentes, que en conjunto suelen clasificarse como herrajes para puertas cortafuegos. Entre ellos, el mecanismo de cierre y liberación rápida (como las barras antipánico) y los muelles cierrapuertas.

Algunos tipos de cerraduras para puertas cortafuegos

En caso de incendio, los ocupantes y visitantes deben poder evacuar el edificio de forma rápida. A menudo se instalan varias salidas para reducir la distancia de escape o para proporcionar una salida alternativa. Estas son salidas de emergencia y no deberían tener una cerradura convencional.

Hay una variedad de formas de asegurar las puertas de salida de incendios de manera que cualquier persona pueda abrirlas fácilmente desde el interior en caso de emergencia:

Barras antipánico

También llamadas barras de empuje, se utilizan donde un gran número de personas pueden intentar utilizar una salida de incendios. Una presión mínima sobre la barra libera el mecanismo de bloqueo.

Almohadillas y paleta de empuje

Muy similares a las barras de empuje, pero con una almohadilla pequeña o una pequeña palanca en lugar de una barra horizontal. La presión de una persona, o una multitud, provocará la apertura de la puerta.

Cerraduras magnéticas

Estas mantienen la puerta cerrada mediante una fuerza electromagnética entre un imán y una placa de acero. Desde dentro se puede abrir con un simple pulsador, y desde fuera con un teclado numérico.

Estas cerraduras pueden configurarse para abrir la puerta en caso de corte de la alimentación o de una alarma de incendios.

Como ha podido comprobar, el objetivo de las puertas cortafuegos es mantener el fuego confinado mientras ofrecen una vía de escape hacia el exterior para los ocupantes. La selección de la cerradura apropiada es crítica para que la puerta pueda cumplir con su función.